Cartas a una hija en su cumpleaños

Querida hija,.

Hoy es un día muy especial, ya que celebramos tu cumpleaños.

No puedo creer lo rápido que ha pasado el tiempo, parece que fue ayer cuando te tuve en mis brazos por primera vez.

Desde ese momento, mi vida cambió por completo y me convertí en la persona más feliz del mundo al tenerte como hija.

Me siento muy afortunada de ser tu madre y de ver cómo has crecido y te has convertido en una mujer fuerte, inteligente y hermosa.

En este día tan importante, quiero aprovechar para expresarte todo el amor que siento por ti y para recordarte lo especial que eres para mí.

A lo largo de estos años, hemos compartido momentos inolvidables juntas. Desde tus primeras sonrisas y tus primeros pasos, hasta tus logros académicos y tus sueños e ilusiones. Siempre he estado ahí para apoyarte, para animarte y para celebrar cada uno de tus triunfos. Pero también hemos pasado por momentos difíciles, momentos en los que has necesitado mi ayuda y mi orientación.

Y en esos momentos, tú también me has demostrado tu fuerza y tu valentía. Eres una hija maravillosa y estoy orgullosa de la mujer en la que te estás convirtiendo.

En este día tan especial, quiero desearte un feliz cumpleaños y pedirle a Dios que te bendiga con mucha salud, amor y felicidad. Espero que todos tus deseos se hagan realidad y que siempre tengas la fuerza y la determinación para alcanzar tus metas. Recuerdo que cuando eras pequeña, me pedías una carta de cumpleaños cada año.

Y aunque ahora ya no lo haces, quiero seguir esa tradición y escribirte esta carta para que siempre tengas un recordatorio de cuánto te quiero y lo orgullosa que estoy de ti. Mi mayor deseo es que seas feliz y que nunca pierdas esa sonrisa tan hermosa que tienes. Eres una persona única y especial, y siempre te amaré incondicionalmente. Nunca olvides que siempre puedes contar conmigo, en los buenos y en los malos momentos. Mi amor por ti es infinito y siempre estaré aquí para apoyarte y guiarte en tu camino. Espero que este día esté lleno de alegría, amor y sorpresas. Te mereces todo lo mejor y más en la vida.

Disfruta de tu día, hija mía, y recuerda que en mi corazón siempre tendrás un lugar especial. Feliz cumpleaños, mi niña.

Te quiero con todo mi coraz.